Mientras esperamos a que los controladores de vídeo libres para las principales marcas mejoren en muchos las prestaciones de sus alternativas privativas, NVIDIA lanza un «nuevo» driver para Linux, como indica el título de la entrada, de «soporte prolongado».
En realidad se trata de una nueva rama de mantenimiento de los controladores actuales de NVIDIA que solo proveerá actualizaciones para fallos críticos o menores de bajo riesgo, pero nunca nuevas funcionalidades, según informan en Phoronix.
Será algo similar a lo que ya sucede con las versiones antiguas de controladores NVIDIA, las conocidas como «legacy», que solo reciben resoluciones de errores, pero ampliando el espectro de las actualizaciones al soporte de tarjetas más actuales que estén limitadas o no puedan hacer uso de las últimas tecnologías.
La versión por la que comienzan con este «soporte prolongado» es la 275.28, y como indica un desarrollador de NVIDIA: «Si alguna vez has utilizado versiones LTS de Ubuntu, la idea es parecida«.