En este artículo os comentaré algunos de los detalles más importantes de Elementary OS Luna, la nueva y esperada versión de esta distribución basada en Ubuntu e inspirada en OS X. Las pruebas han sido realizadas a través de una máquina virtual de VirtualBox y mi intención no ha sido medir el rendimiento de Elementary OS a nivel cuantitativo, sino más bien analizar ciertos elementos a la hora de usarlos.
¿Qué es Elementary OS?
Siendo la segunda versión de esta distribución, creo que esta es una pregunta obligada, así que voy a recurrir a Wikipedia para que nos introduzca este sistema operativo:
Elementary OS es una distribución Linux basada en Ubuntu. Usa un entorno de escritorio basado en GNOME con un shell propio llamado Pantheon. Dicho entorno destaca por ser más ligero que GNOME Shell y por la integración con otras aplicaciones de elementary OS como Plank (dock) y Midori (el navegador web).
Instalación
Después de la explicación de Wikipedia, se puede deducir que estamos ante uno de los muchos clones de Ubuntu, aunque por suerte este tiene alguna personalidad y viene a aportar algo.
Elementary OS Luna está basada en la versión 12.04 LTS de Ubuntu y su instalación es totalmente clavada, con los mismo pasos, así que a la mayoría de los linuxeros básicos no tendrán ningún problema en instalar Elementary OS.
Si sois novatos en esto, buscad en Google instalar Ubuntu 12.04 para que os aparezcan manuales sobre cómo instalar Elementary OS. Los pantallazos de los tutoriales tendrán un aspecto diferente al del sistema que nos ocupa, pero todo está ubicado en los mismos sitios, así que no hay pérdida.
Primer inicio
Si hay algo a destacar de esta distribución, es su pulida estética y la espectacularidad que derrocha. La pantalla de inició de sesión es impresionante, con unos efectos la mar de resultones, lejos del estilo simple que siempre hemos visto en el escritorio Linux.
Una vez iniciada la sesión, por fin vemos la verdadera cara de Elementary OS, donde la inspiración en OS X es más que evidente y resulta muy atractiva.
Tras el primer vistazo, voy a mencionar las dos partes más destacables de su particular interfaz, Pantheon, otro miembro más en la fiesta de la fragmentación de GNOME 3 o, dicho de otro modo, otra shell más, como Unity, GNOME Shell o Cinnamon.
Slingshot
Slingshot es el menú / lanzador / buscador de Pantheon, que viene a sustituir al Dash de Unity.
Como podéis ver en la imagen, su lanzador tiene la intención de ser algo más parecido a uno clásico que a los de GNOME Shell y Unity, que ocupan toda la pantalla o buena parte de ella. A pesar de que se ve bonito, la verdad es que se muestra un tanto limitado.
En primer lugar, el hecho de que Slingshot no se active a través de la tecla Super (conocida como Tecla Windows) es algo que me ha molestado de veras, ya que tanto en Unity como GNOME-Shell si se activan pulsando dicha tecla, lo que ayuda mucho a su usabilidad. Esto deja el lanzador de Pantheon un poco en tierra de nadie, ya que su funcionamiento es como la de uno clásico pero su activación es como la de uno moderno, teniendo que llevar el cursor del ratón a algún lugar de la pantalla (en este caso, la parte superior izquierda de la pantalla).
Se puede observar que el lanzador de Pantheon muestra varias categorías y para poder seleccionarlas y ver las aplicaciones que contienen hay que hacer clic, cosa que yo tampoco veo muy práctica. Personalmente pienso que el cambio de categoría debería de hacerse mediante hover, o sea, poniendo el cursor del ratón sobre una categoría para mostrar sus aplicaciones. Aunque este último detalle es más una apreciación personal, creo que ayudaría a este lanzador a ganar rapidez de uso.
En definitiva, el lanzador tiene buenas intenciones, pero se muestra algo inferior a la competencia, aunque por suerte el buscador cumple muy bien con su papel.
Plank
Plank es el dock de Pantheon, situado en la parte inferior de la pantalla y como cualquier otro software de este estilo su misión es la de hacer de lanzador de aplicaciones a la vez de barra de tareas.
Plank es muy sencillo de usar y los iconos se pueden se pueden arrastrar para cambiarlos de posición. También se puede destacar que deja muy claro qué aplicaciones se están ejecutando a través de señales de colores en la base de los iconos, ya que los docks a veces son algo confusos a la hora de minimizar las aplicaciones, no dejando muy visible si están en ejecución o no, lo que puede hacer que uno se confunda y que al final se tenga más programas de la cuenta ejecutándose.
Añadir iconos al Plank es muy sencillo, solo hay que arrastrarlos hasta él y para quitarlos un simple clic con el botón secundario del ratón muestra el menú contextual para poder eliminarlo.
Sin embargo, no todo es bonito en Plank, ya que para modificar su comportamiento y su aspecto nos tenemos que dirigir a Escritorio – Dock en Preferencias del sistema. Personalmente, creo que se debería de poder acceder a dichas opciones a través del menú contextual del dock para hacerlo un poco más práctico.
Aplicaciones por defecto
Elementary OS pretender ser un sistema operativo ligero, o sea, que consuma pocos recursos, y eso se nota en algunas de sus aplicaciones por defecto.
Como navegador web por defecto tenemos a Midori, que aunque tiene buenas intenciones, en mi opinión le falta para cumplir un rol así en una distribución, ya que a veces me muestra las versiones para móviles de las webs en vez de la versión escritorio, aparte que se muestra limitado para la gestión de contraseñas.
Como cliente de correo tenemos Geary, que sin ánimo de ofender, está más que verde. ¿Un cliente de correo que no permite POP? Eso es como un perrito caliente sin salchicha, le falta lo mejor. Cierto que POP hoy en día no se usa demasiado, pero yo lo uso para una cuenta de correo donde tengo tutoriales de informática y así poder consultarlos sin tener una conexión a Internet.
Otra aplicación a destacar es Scratch, el editor de texto plano. Se queda lejos de reinventar la rueda, pero me ha agradado mucho su interfaz supersimple y es capaz de reconocer la sintaxis de algunos lenguajes, como HTML.
Después tenemos una serie de aplicaciones clásicas de GNOME, como Empathy como programa de mensajería instantánea, Rhythmbox Music para el audio, Totem para el vídeo, Shotwell como organizador y visor de imágenes.
Cabe destacar que Elementary OS no trae por defecto un gran número de aplicaciones, lo que gustará a la gente que quiera un sistema totalmente ajustado a sus necesidades, sin añadidos innecesarios, aunque creo que lo primero que deberíais hacer cuando estrenéis el sistema es instalar Firefox o Chrome/Chromium si queréis tener un buen navegador web y Thunderbird o Evolution para tener buen cliente de correo.
Repositorios y Centro de software
Elementary OS no se corta un pelo en lo de ser un clon de Ubuntu y bebe directamente de los repositorios de Ubuntu 12.04, lo que le permite tener su mismo tiempo de soporte.
Aparte de los repositorios de Ubuntu 12.04, Elementary OS tiene una serie de PPA instaladas por defecto que actualizan su entorno de escritorio, lo que permite a los desarrolladores centrarse en lo que quieren hacer.
Elementary OS usa el Centro de software de Ubuntu, elemento que ayudará bastante en la migración de los fans del sistema de Canonical. Cabe mencionar que podéis instalar directamente el paquete Ubuntu Restricted Extras, el cual instala todo el software privativo necesario para una correcta experiencia multimedia, tanto a nivel de sistema como web.
Panel de control
Salvando las diferencias estéticas y alguna categoría extra, el Panel de control de Elementary OS es prácticamente clavado al del sistema de Canonical y este a su vez se basa en el panel de control de GNOME 3, lo que no supondrá ninguna complicación a los que estén acomodados a la última versión del escritorio GTK por excelencia.
Pequeños errores
Se nota que Elementary es un sistema (o mejor dicho entorno) nuevo y que tiene algunas cosas por depurar. Aparte de las críticas vertidas a Plank y Pantheon, este sistema tiene algunos pequeños fallos de diseño (a nivel de aplicación, no estéticos) un tanto tontos.
Elementary OS tiene por defecto el botón cerrar en la parte superior izquierda de las ventanas, esto hace que al tener la ventana de la configuración de monitores maximizada no pueda cerrarla, forzando a minimizarla para poder cerrar.
Conclusión
A pesar de ciertos detalles que al fin y al cabo no son graves, Elementary OS ha llegado pisando fuerte y convirtiéndose del tirón en el GNU/Linux más bonito y espectacular de la historia, al menos en su apariencia por defecto.
La gente que esté familiarizada con Ubuntu no encontrarán problemas para adaptarse a Elementary OS, aunque como he dicho antes, nada más instalar el sistema se le tiene que meter algunas aplicaciones que no están por filosofía pero que en mi opinión no pueden faltar.
Elementary OS no viene revolucionar nada a nivel técnico, pero sin duda se ha convertido en todo un referente en cuanto a cuidado del aspecto externo, algo que se tiene muy en cuenta desde que Apple se ha puesto de moda y que a veces se valora más que la propia calidad técnica del software. Si algún día alguien os dice que GNU/Linux es feo, este sistema es sin duda vuestra mejor arma para ponerle los dientes largos.
Os dejo con un pequeño vídeo, un poco cutre, pero al menos muestra un poco la belleza y espectacularidad de este sistema operativo.
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