Hoy es el lanzamiento a nivel global de OpenOffice.org 3.0, la tercera gran iteración de la suite ofimática Open Source más conocida y popular del planeta, y que llevábamos ya tiempo esperando. Varias betas (cuyas reviews ya adelantaban muchas de las mejoras actuales) han precedido la aparición final de OpenOffice.org 3.0, y la pregunta que a uno le queda tras analizar los cambios realizados es si realmente esta nueva versión merecía un número tan importante y «redondo» como el «3.0» que la califica.
Lo cierto es que las diferencias entre las versiones 1.x y la 2.0 (que apareció el 20 de octubre de 2005) fueron impresionantes, y el salto parecía justificado, pero ahora la relevancia de algunos cambios no es tan destacable, quizá como lo fueron en aquel momento.
En Linux.com realizan un repaso de las principales mejoras en OpenOffice.org (cuya web ahora mismo está inaccesible, suponemos que para poner a punto todos los detalles de la descarga y los típicos «Guided tours«) y destacan entre ellas el soporte del formato ODF v1.2, mejor soporte de macros Microsoft VBA (importantes para muchos documentos), mejoras en la autocorrección con un documento en varios idiomas, y los dos cambios más significativos para mí: soporte nativo para Mac OS X y soporte (con polémica incluida) para OOXML, el formato «abierto» de Microsoft que está en proceso de estandarizarse por el organismo ISO.
Desde luego si esas son las mejoras más importantes la cosa no parece tan notable, pero también es cierto que las aplicaciones más importantes de la suite (Writer, Calc, Impress) también se han renovado con aspectos interesantes, que sin embargo no son tan drásticos como parece. Por ejemplo, la interfaz de usuario no se ha tocado, y aunque es cómoda por conocida, en ese sentido sus desarrolladores quizá deberían haber renovado su aspecto visual, algo que aporta cambios relevantes en temas como la usabilidad. Habrá que echarle un buen vistazo para ver si el salto en el número de versión está realmente justificado. Sea como sea, siempre es bueno saber que proyectos tan importantes como este siguen avanzando sin parar.