Es un truco bastante popular, pero ya se sabe: nunca viene mal recordar este tipo de cosas. En RootNinja precisamente hacen un resumen de los pasos necesarios para tener nuestra propia imagen personalizada en GRUB.
La tarea es relativamente sencilla aunque, eso sí, deberemos cumplir una serie de requisitos:
- El tamaño debe ser 640×480 píxeles
- Sólo podrá tener 14 colores
- Debemos guardarla en formato XPM
Para cumplir esas condiciones de un solo golpe afortunadamente contamos con ImageMagick, las librerías gráficas que entre otras cosas proporcionan la función convert para poder realizar la conversión de una imagen a otra con el formato, resolución y profundidad de color adecuado. Para ello tan solo tendremos que escribir
c3965f0d11f4e9ec43acaed334310db7004
Tras ese paso solo restará editar el fichero /boot/grub/menu.lst para incluir la línea:
c3965f0d11f4e9ec43acaed334310db7005
Teniendo en cuenta, claro está, que tenemos esa imagen en dicha ruta y que el disco (hdo,o) es en el que se encuentra nuestra distribución. Modificadlo según el caso, y habréis conseguido un menú de arranque algo más vistoso.