No sabía que estas cosas llegaran hasta el mundo Linux, pero en realidad precisamente mi confusión es la que por lo visto también tienen otros muchos miembros de la comunidad Linux. Y es que a pesar de ese nombre tan curioso, el proyecto Ubuntu Women no es precisamente una especie de frente feminista dentro de la comunidad Ubuntu.
La reciente celebración del Ubuntu Developer Summit ha permitido ofrecer tres conferencias en las que se habló en mayor o menor medida de este proyecto, que tiene unos objetivos claros que no son separatistas ni nada parecido. Así que si sois chicas (¿hay lectoras femeninas de MuyLinux?) y os gunta Ubuntu deberíais seguir leyendo. Y si no, también.
Los objetivos están descritos en el roadmap del proyecto, que forma parte del wiki de la página oficial. En dichos objetivos lo que se quiere es básicamente que haya mayor participación de las mujeres en la comunidad de Ubuntu, tanto en sus proyectos como en sus organismos de gobierno.
Así, uno de los objetivos consiste en tener al menos 3 mujeres participando de forma activa en los proyectos Ubuntu más importantes. El segundo objetivo relevante es, me temo, mucho más difícil de alcanzar. Que las mujeres representen el 50% de todos los organismos de gobierno y gestión de la distribución es complicado, ya que la mayoría de hombres en esta comunidad es patente.
El proyecto incluso dispone de un canal IRC llamado @ubuntu-women que ha sido criticado por algunos usuarios por sus teóricos tintes feministas, pero ya hay un código de conducta y unas líneas básicas que explican que cualquiera puede entrar en dicho canal para debatir temas relacionados con Ubuntu aunque, eso sí, en inglés.
En general me parece un proyecto curioso, aunque no acabo de entender ese afán de diferenciación. ¿Qué más da que el usuario de Ubuntu sea hombre o mujer? Como indica Matt Zimmerman en su blog, en realidad este proyecto es poco feminista en comparación con Geek Feminism, que trata todo el tema friki desde la perspectiva de las mujeres y para las mujeres.