Fantástico el artículo que encontramos en The Linux Experiment y en el cual nos ofrecen los datos necesarios para poder responder a una pregunta interesante: ¿cuál es la distribución Linux más ligera? Aunque hoy en día existen distros para todos los gustos y los usuarios disponen de máquinas cada vez más capaces, el consumo de recursos es una de las preocupaciones más importantes para los usuarios de Linux.
Por ello es interesante comprobar cómo se comportan distintas distribuciones en varios momentos de la instalación, tal y como ha hecho el autor de esta comparativa en la cual se han probado algunas de las más conocidas aunque de una forma algo especial: se ha hecho todo con instalaciones en máquinas virtuales mediante VirtualBox, algo que da un indicio muy importante de cómo se comportarán en entornos reales, pero que también puede suponer un punto a tener en cuenta para sacar conclusiones.
Es lo que ha afirmado el propio autor, que afirma que su estudio «no es muy científico», y lo hizo en su tiempo libre solo por curiosidad. Es una lástima que distros como Arch Linux o Gentoo no estén incluidas -probablemente nos llevaríamos buenas sorpresas en ambos casos- pero aún así es interesante comprobar sus resultados.
Las gráficas muestran por ejemplo el uso de memoria durante el primer inicio, el uso de memoria tras las actualizaciones, o el espacio en disco que ocuparon las distros antes y después de las actualizaciones. Es cierto que se podía haber completado el análisis con más pruebas (consumo de CPU con ciertas aplicaciones abiertas, quizás un Phoronix Test Suite para obtener índices de rendimiento comparativos), pero como digo es un esfuerzo curioso.
Según las gráficas, las distribuciones que menos RAM consumen son Debian 5.0, Xubuntu 9.10 y Ubuntu 9.10, mientras que en en tamaño que se ocupa para la instalación Debian 5.0 vuelve a ser especialmente interesante, ya que ocupa menos de 1,5 Gbytes: todas sus rivales (Xubuntu, la más cercana) ocupan más de 2 Gbytes, y openSUSE 11.2 con KDE llega a los 3,5 Gbytes.