Muchos sois cada vez más fans de Arch Linux, una distribución que está ganando popularidad por su modularidad, su rapidez y su capacidad de personalización, y una de las formas más recomendables de conocer esta distro es a través del Chakra Project, que añadía una serie de componentes, pero que siempre tenía esa base Arch.
Sin embargo sus desarrolladores anuncian ahora que van a separar su camino de su distribución base, y lo explican con varios argumentos:
«Arch nos ha servido como base desde que se inició el proyecto y estábamos contentos de ser parte de esta comunidad. Sin embargo algunas veces pensamos que podíamos hacer ciertas cosas mejor, especialmente a la hora de ofrecer un KDE SC más pulido que el de la distribución convencional. Esa fue la chispa que inició la idea de separarnos de Linux. Con la nueva base construiremos un sistema creado por y para el escriorio KDE. Sí, seguro que esto dará mucho trabajo, pero gracias a la existencia de sistemas de compilación automatizados y de ordenadores con micros quad-core creemos que seremos capaces de manejar esa carga de trabajo».
Eso tendrá una consecuencia inmediata: en el Proyecto Chakra no habrá más que componentes KDE. Ni GNOME, ni GTK, ni nada que no sea necesario para el usuario «usual» -aunque no especifican a qué se refieren con eso. Eso sí, habrá formas de instalar componentes de terceras partes, pero dicen que quieren ofrecer un paquete completo, similar a la filosofía de Mac OS X.
No soy usuario de Chakra, pero no sé qué tal sentará la noticia entre sus usuarios y los seguidores de Arch. Personalmente no me gusta que cierren la puerta a otros entornos de escritorio, pero entiendo que quieran centrarse en una solución KDE específica que integre este fantástico entorno lo mejor posible. Y también es verdad que los que quieran usar Arch Linux con GNOME seguirán pudiendo hacerlo. En fin: que lo importante es que Chakra quiere evolucionar por su propio camino. Y para eso hacía falta romper la relación. ¿Pobre Arch?
(¡Gracias por el aviso, juan!)