Hay literalmente cientos de distribuciones Linux disponibles, pero solo un puñado de ellas pueden considerarse como totalmente fieles al concepto de software libre, la filosofía que defiende especialmente Richard M. Stallman y que trata de luchar contra la inclusión de cualquier tipo de código propietario en ellas.
Ya hemos hablado en alguna ocasión de alguna de estas distribuciones, pero gracias al artículo publicado en UnixCraft podemos hacer un repaso de cinco distribuciones que precisamente siguen esa filosofía «pura» en la que nos olvidamos de la inclusión de cualquier tipo de, por ejemplo, controladores binarios que no incluyen código fuente, conocidos popularmente como binary blobs. Y los nominados son:
gNewSense
Probablemente la más popular de todas las distribuciones puras sigue su evolución, y de hecho hace poco pidió ayuda a los usuarios para seguir creciendo. Entre las novedades destacadas de la futura gNewSense 3.0 estará el hecho de que se basará en Debian en lugar de Ubuntu.
La actual versión, gNewSense 2.3, sigue basándose en Ubuntu, pero sus responsables han eliminado todo tipo de software no libre y de binary blobs. La FSF considera a gnewSense como una distribución GNU/Linux completamente integrada por software libre.
Dragora
Esta distribución está desarrollada por un grupo de usuarios argenitinos que también quisieron eliminar cualquier rastro de software propietario en ella, y parece que lo han conseguido: dispone de un kernel del proyecto Linux-libre y consta de un sencillo gestor de paquetes que permite instalarlos o eliminarlos con sencillez.
Entre sus puntos de interés está el uso de runit como sistema de inicio por defecto, algo que nos permitirá controlar los servicios y componentes que se ejecutan durante el inicio de cada sesión.
BLAG
Esta distribución está basada en Fedora, y actualmente hay disponibles dos versiones distintas. BLAG90001, la última distribución calificada como «estable» está basada en Fedora 9 y fue lanzada en julio de 2008.
Por su parte, BLAG14000 está basada en Fedora 14, lo que nos garantiza componentes mucho más modernos, y el LiveCD también está disponible para su descarga.
Musix
Curiosamente esta distribución no está pensada para usuarios genéricos, sino que como su propio nombre indica la idea es aportar todo tipo de herramientas para ayudar a los que disfrutan o trabajan en el mundo de la música.
La FSF la reconoce como una distribución compuesta únicamente de software libre, y este proyecto está desarrollado por un equipo de usuarios de Argentina, España, México y Brasil. De hecho, el principal idioma utilizado en sus foros y su documentación es español.
Trisquel
No podía faltar en este repaso Trisquel, una de las distribuciones «puras» más populares entre nuestros lectores -sabemos que algunos sois usuarios veteranos de ella- y que como sucede con gNewSense (al menos hasta ahora) está basada en Ubuntu, pero obviamente con todos sus potenciales componentes propietarios eliminados.
Como indican en la página web oficial, Trisquel dispone de varias versiones. La genérica, para todos los usuarios, se une a una versión Edu para centros educativos, una edición Pro para empresas, y una versión Mini para netbooks y ordenadores algo más limitados en recursos.