Con lanzamiento previsto para ayer 22 de septiembre, la nueva versión de desarrollo de openSUSE 12.1 retrasa por lo menos un par de semanas su salida para pulir algunos de los nuevos elementos que acompañarán en la puesta de largo a la distribución.
En concreto, en estos momentos se trabaja en completar la integración de systemd en el sistema, uno de las nuevas características más delicadas con la que de momento solo se han atrevido Fedora y Mandriva, por lo que conociendo lo concienzudos que pueden ser los desarrolladores de openSUSE con las cuestiones técnicas, no es de extrañar la demora.
Otras de las novedades que presentará openSUSE 12.1 será el soporte completo para el sistema de archivos Btrfs, sobre el que ya es posible instalar la partición de root, aunque de hacerse, una partición extra para boot en ext2/3 es requerida, ya que la nueva versión de la distribución seguirá utilizando el GRUB clásico.
Además de lo dicho, hay noticias para lo usuarios de los diferentes escritorios: se seguirán manteniendo las aplicaciones y paquetes más demandados de KDE 3 y GNOME 2, pero este último entorno no estará disponible de manera oficial para su instalación, ya que los desarrolladores prefieren centrar sus esfuerzos en ofrecer la mejor experiencia posible con GNOME 3.
En cuanto a Xfce y LXDE, estarán tan presentes como siempre y por último KDE seguirá siendo la joya de la corona (seguramente KDE SC 4.7.2).
Recordar también que las versiones de desarrollo de openSUSE cambiaron de las típicas milestones -después de su última Milestone 5- a Beta, a la que le seguirán dos RC, una Goldmaster y finalmente el lanzamiento final el próximo 11 de noviembre (o el 11/11/11, en «pura competencia» con la penúltima versión de Ubuntu, 10/10/10).