Se suele repetir mucho eso de que «no es lo mismo copias de seguridad que sincronización de archivos«. En cierto modo es cierto, valga la redundancia, pero poco a poco la línea se va haciendo más delgada, todo por esa cosa llamada comodidad que tanto nos gusta, además de por el concepto «nube», que lleva camino de convertirse en uno de los pilares más importantes de la computación «pública» o privada actual, nos guste o no.
Ayer Picajoso publicaba la noticia del lanzamiento de ownCloud 2 y en los comentarios surgió -cómo no- el tema de la comodidad que no aporta ese software, lo cual es cierto. A cambio lo que ofrece es una flexibilidad enorme, como pasa con otras alternativas similares como SparkleShare.
Es decir, si quieres comodidad desde el punto de vista de un usuario normal, Dropbox o Ubuntu One son ideales, qué duda cabe. Pero justo esas dos aplicaciones/servicios, aun con sus ventajas (DropBox es sencillísimo y muy fiable y Ubuntu One es muy completo para usuarios de Ubuntu) tiene varias carencias importantes, que ownCloud suple por mucho.
La primera es la versatilidad, la segunda es la seguridad, y es que precisamente Dropbox y Ubuntu One son los dos grandes de su clase con la peor seguridad por defecto, pues no cifran los archivos localmente, con lo cual desde ambas compañías puede saber qué guardan sus usuarios en todo momento (bueno, aquí irían de la mano seguridad y privacidad). Dropbox, de hecho, ya ha tenido problemas por ello.
Lo frustrante de ownCloud es que un usuario cualquiera que se lo baje y eche un vistazo a las instrucciones de instalación, se echa para atrás seguro, porque es un rollo en toda regla. Además, contar con un servidor es barato, sí, pero la seguridad se paga aparte, y Dropbox o Ubuntu One ya tienen esa seguridad en sus servidores (es una locura guardar archivos personales en un servidor propio o alquilado cuyo tráfico no esté cifrado).
Bajo mi punto de vista, una buena solución sería que desde el mismo proyecto KDE se montase un negocio sobre ownCloud, consiguiendo un beneficio económico que siempre viene bien. Pero no parece que algo así vaya a pasar, como tampoco parece que en Amarok o Clementine vayan a implementar una tienda de música comercial (algo que personalmente me parece una idiotez).
Si para algún cliente ownCloud fuera una solución interesante, no tardía mucho en implementarlo en sus servidores, pero todavía no me ha llegado el caso. En el terreno propio, no necesito ownCloud, al menos de momento. Usaría Ubuntu One o MandrivaSync (tampoco cifra nada en local esta última) de estar disponibles para mi distribución, como apoyo a ambas compañías, pero tampoco es el caso. Curiosamente y a pesar de la intrínseca seguridad del software libre de la que ya hablamos hace un tiempo, son aplicaciones/servicios parcialmente cerrados los que mejores características ofrecen: Wuala y SpiderOak son lo mejor y más seguro como soluciones personales de ‘backup&sync’ -o almacenamiento y sincronización- para cualquier sistema operativo, por lo menos hasta que Syncany levante cabeza.
Si queréis conocer todas las aplicaciones mencionada y unas cuantas más de las disponibles en GNU/Linux, ya publicamos un artículo a ese efecto. Tal vez otro día hable a fondo de Wuala y SpiderOak porque se lo merecen (este último ha mejorado su seguridad aún más con la doble autentificación), pero no hoy.
Si os digo que mi elección actual es SpiderOak, y funciona muy bien. Tiene varias ventajas respecto a sus competidores y además cuenta con programa de referidos, con el que aumentar el espacio gratuito de los 2 GB iniciales a 50 GB (así que… le echo un poco de cara para dejaros mi enlace para crear una cuenta en SpiderOak, a ver si me cae algún GB gratuito ;).