Como ya se citó en MuyLinux, recientemente Linux Mint ha superado a Ubuntu en cuanto a popularidad. Sin embargo son varias las incertidumbres sobre su futuro, ya se habló tiempo atrás de la decisión de los responsables de Linux Mint sobre seguir la estela de GNOME 3 en vez de continuar con un fork del escritorio clásico, aunque de una manera un tanto peculiar.
Pero además de esto han surgido otras especulaciones sobre el futuro de esta distribución, en esta ocasión versan sobre la base de Mint en futuras ediciones. Y para sorpresa, los resultados de una encuesta que lleva tiempo realizándose en los foros de Linux Mint parecen indicar que son pocos los usuarios que desean que su distribución siga basada en Ubuntu.
Un buen porcentaje de ellos prefiere que Linux Mint mantenga su propia distribución, pero parece ser que la mayoría pide a gritos que tenga a Debian como nueva base.
Ahora bien, Linux Mint ya tiene su propia versión basada en Debian, aunque para no dar lugar a equivocaciones no es un simple Debian con el escritorio de Mint. LMDE (Linux Mint Debian Edition) se basa en la rama testing de Debian (Wheezy) y también coge elementos de la estable, además cuenta con los controladores privativos y códecs por defecto y como sistema de archivos hace uso de Ext4, mientras que Debian Squeeze viene por defecto con Ext3.
Sin embargo lo que los usuarios piden no es un LMDE, no. Lo que piden es que la edición principal de la distribución tenga la base en Debian y que gane un aire más debianita, pero al mismo tiempo ofreciendo una experiencia de usuario final excelente, algo a lo que Linux Mint nos tiene acostumbrados, en conclusión, un sistema más potente, veloz y estable, y a la par tan fácil de usar como la versión actualmente basada en Ubuntu.
Artículo de Ivan Costa