De tanto en tanto, antes de sentarme a escribir, leo comentarios del resto de los artículos de MuyLinux como para conocer un poco las opiniones variadas de cierto tema y, por otro lado, para sacar alguna idea. Digo, como para brindaros exactamente lo que queréis (o alguien quiere) leer, siempre y cuando me sienta capaz de escribir al respecto. Mire Ustedpublicó sobre una distribución llamada SolusOS, un nombre poco atractivo me atrevo a decir. Igual no me fío de las apariencias, así que preferí buscar algo de información al respecto y probarla.
SolusOS está basada en Debian Stable y… (¡atentos!) hace uso de los backports de GNOME 2, lo que es un buen detalle a tener por defecto. En su sitio web, afirman que es una distro que provee las herramientas necesarias para escuchar música, navegar por internet y crear documentos. Viene en imágenes de casi 1 GB para DVD o pendrive con soporte para 32 y 64 bits, lo típico. Además, se puede optar para los usuarios de la arquitectura primera sin soporte de PAE básicamente para los ordenadores antiguos que no tienen dicha característica.
Para comenzar, debo dar un pequeño detalle del instalador. En principio, todo funciona como es debido y esperado: nos encontramos, tal como lo muestra la imagen, con el clásico escritorio tardío del GNOME 2 con un orden bastante tradicional y un menú llamado Cardapio que sigue la misma línea del escritorio. Sin embargo, ahí no está el detalle. El tema viene a la hora de instalar. Al momento de preparar las particiones me encontré con algo que me encantó y al mismo tiempo disgustó un poco.
Paso a explicar esta contradicción: resulta ser que nos encontramos como si estuviéramos en la configuración manual de particiones que muestra todas las existentes y uno puede elegir el punto de montaje y, si no se está del todo satisfecho, la sección invita a editarlas por medio de GParted. Ahora, teniendo en cuenta que es una distribución un tanto orientada al usuario principiante, me parece que, siendo un estándar en las distribuciones populares, se debería agregar un modo guiado para quien nunca haya realizado este proceso. Aunque estoy seguro que no tardará mucho en llegar. Después de eso, me parece perfecto. Aparte, en la wiki oficial dan una explicación sobre cómo llevar a cabo el particionado.
Con el sistema ya instalado, antes de entrar a ver qué aplicaciones trae por defecto, permtidme jugar un poco con las capacidades de personalización del sistema. Por supuesto, una idea hay de momento que estamos usando GNOME 2. Primero, quizá para mí uno de los detalles más importantes, la selección de fondos de pantallas está bien. Digo, hay una variedad de fondos con el logo de la distribución, más los fondos típicos que suelen venir con lo que no hace falta salir a buscar más. Luego, el panel: no me gusta, es muy angosto. Le sumo unos detalles al botón del menú y creo que está listo.
Una vez todo preparado, no me quiero olvidar del configurador del primer uso que había dejado para más adelante. En la primer ventana, dan una lista de links útiles que son al sitio oficial, guías y foros; bastante importante para quien no esté al tanto de esta información (más que nada por las dos últimas). Luego, sigue por el tema de la configuración de la red y firewall. Como no tengo este ordenador con WiFi desconozco qué tan funcional es en ese caso. Le sigue la placa de video que, en mi caso no hay opciones a elegir pues estoy en una máquina virtual, parece ofrecer una lista de controladores disponibles; más que nada para los controladores privativos en el caso que el usuario los requiera. Finalmente, permite elegir los horarios de actualización y si se le permite al sistema instalar automáticamente, actualizaciones normales o de seguridad, o si avisar antes.
Como habréis visto en los enlaces anteriores, el sistema está (por ahora) oficialmente en inglés. Si bien la mayoría de las aplicaciones están traducidas, todo lo propio de SolusOS (por ejemplo el configurador del primer uso), además de los sitios web, no se ha traducido a otros idiomas aunque no pasa a ser más que un detalle pues, hoy en día, es cada vez más probable que en general se sepa un mínimo de inglés como para poder comprender la información. Quizás el mayor problema son las guías pero, aún así, debido a la presencia de capturas y comandos, se hace bastante comprensible.
En cuanto a aplicaciones, trae una colección algo variada pero, a la vez, útil. Además del paquete de aplicaciones que vienen con GNOME están Firefox, Transmission, Thunderbird, Dropbox, XChat, Pidgin, LibreOffice 3.6, Openshot, entre otros. Recordad cuando dije lo de los controladores privativos: eso viene a que la distro está destinada a que se ejecuten juegos en ella por medio de Wine y PlayOnLinux. Por lo que creo que la mayoría de gustos y necesidades están cubiertos… salvo por algo que no está (posiblemente vosotros encontréis más pero esto me llamo significativamente la atención). ¿GIMP? No es problema, se instala. De hecho eso nos da pie para hablar del gestor de paquetes.
Tenemos a gpk, el mismo de Fedora pero para .deb en este caso. Aunque también esta el viejo y querido Synaptic. De los dos, el primero resulta ser más sencillo y directo, mientras que el segundo es más amplio y detallado. Yo siempre preferí al segundo, por lo tanto con ese me quedaré. Sin embargo, es buena la propuesta de tener ambos por si uno no está del todo satisfecho con uno o con le otro. Quizás algún día les dedique más tiempo a los gestores de paquetes pero por ahora no es el punto. Por otro lado, parece que se anunció que SolusOS pasará al sistema de paquetería PiSi de Pardus dejando, así, de lado a Debian. Lamentablemente, la noticia original parece no existir más. Sin embargo, en deblinux tienen una entrevista con el autor, Ikey Doherty, hablando sobre la nueva versión.
Mientras tanto, existe una versión alfa de lo que se esperaría para la próxima entrega. Aún cuenta con paquetes deb y, quizá como novedad, ya hizo el paso a GNOME 3 pero, claro, sin el shell manteniendo así una apariencia similar a su actual versión. No voy a pasar a detallar nada más porque todavía está en pleno proceso de desarrollo y, seguramente, quedan muchos cambios por hacer. Igualmente, parece tener buen futuro. Os dejo una imagen de cómo se vería:
En cuanto a rendimiento, como siempre probando en una máquina virtual, se lo nota bastante fluido; lo cual es esperable teniendo en cuenta que estamos usando nuestro viejo y querido GNOME 2. El consumo mínimo de RAM está aproximadamente en los 150MB por lo tanto se puede decir que es un sistema conveniente para ordenadores de años atrás. No por eso tiene que estar estéticamente atrasado en el tiempo. Para usuarios de equipos más modernos podemos retocar ciertos detalles como Emerald y Compiz. El primero para los bordes de ventanas y, el segundo, bueno ya lo conocéis, efectos de escritorio y demás.
Lamentablemente, Emerald nos viene pelado, sin bordes para aplicar, por lo que, para un usuario casual que no conozca esta aplicación, logrará pasar completamente desapercibida. Por otro lado siempre sentí que no es de las aplicaciones más amigables, en cuanto a personalización del escritorio concierne. Quizás lo mismo con Compiz. Si bien ésta es mucho más sencilla de usar, tampoco se deja mostrar. La encontraríamos un día navegando por el menú de configuraciones, algo que un usuario novel no suele hacer o no suele interesarse. Insisto con esto debido al tipo de usuario que parece apuntar y, tal vez, en el diálogo de bienvenida se le debería contar la existencia de dichos programas al usuario.
En fin, dentro de sus cualidades y defectos, siento que SolusOS es una distro muy recomendable. Como ya mencioné antes, tiene aún sus fallas por ser relativamente nueva (su versión 1.0 salió el año pasado) aunque igualmente no deja de ser muy usable por el simple motivo que no arriesga a lo último, sino a lo funcional. Por supuesto que podría instalar Debian directamente pero, la colección de aplicaciones que trae por defecto, hace que esté completamente lista para usar después de instalarlo. Simplemente se trata de otra distribución basada en Debian pero con la premisa de que se trata de un sistema tradicional.
Vamos a ver cómo evoluciona con el tiempo pero, mientras tanto, yo diría que es una potencial alternativa a todos los sistemas listos (entiéndase Ubuntu, Fedora, OpenSUSE) para usar que traen toda variedad de escritorios modernos y atractivos. Creo que con la salida de GNOME 3, quedó claro que hay gente que, antes, estaba más cómoda.