Si alguien se preguntaba hasta dónde llegaría KDE 4, la respuesta es hasta KDE 4.11 o, dicho con propiedad, hasta Plasma Workspaces 4.11, cuya publicación se espera para mediados de agosto, de acuerdo con el calendario de lanzamiento. Según ese mismo calendario las actualizaciones de mantenimiento de esa versión terminarían con KDE 4.11.5 el 7 de enero de 2014. Pero no será así.
A partir del lanzamiento de KDE 4.11 el escritorio no recibirá nuevas características de base -todo el software dentro de kde-workspaces, kdelibs, kderuntime, etc-, pues los desarrolladores comenzarán a trabajar de lleno sobre Qt5 para ascender al siguiente nivel, Plasma Workspaces 2 («KDE 5»). Pero no se va a abandonar a los usuarios o a forzarlos a subir de versión: KDE 4.11 recibirá soporte durante dos años, incluyendo corrección de errores, mejora en las traducciones , etc.
Asimismo, las aplicaciones que conforman el entorno seguirán su propio calendario, y es muy posible que veamos un KDE 4.12 o superior con nuevas versiones de las aplicaciones, sin cambios en la base. La decisión de hasta cuándo alargar estos lanzamiento de solo aplicaciones es de los desarrolladores de esas aplicaciones, valga la redundancia, aunque lo normal es que se pongan de acuerdo.
Hasta aquí lo más importante de la información que ayer publicaba el conocido desarrollador de KDE Aaron Seigo en su blog, donde también adelantó algo del futuro del proyecto. Un cambio que gustará al usuario es el de las actualizaciones, que se dividirán en dos tipos: escritorio base y aplicaciones. Como indica Seigo, seis meses entre cada versión mayor de la base del escritorio es algo aceptable, pero las aplicaciones se mueven a otro ritmo, uno más rápido.
Son más los detalles que adelanta Seigo, aunque la discusión sigue activa. Nos mantendremos con un ojo puesto en todo lo que se cueza en el que es el escritorio más popular del momento, que en su próxima y última versión de serie alcanzará una solidez inaudita.