Estoy de regreso al presente con Ubuntu 13.10 y una de las características recientes que más me ha interesado desde que se anunció, la integración de webapps en Unity, de las que se dijo en su momento serían «ciudadanos de primera clase» en el ecosistema de aplicaciones del escritorio… Pues, siguen en el gueto.
Lo cierto es que según cómo se mire, lo de las webapps es una tontería, para eso están las pestañas del navegador, para mantener abiertas diferentes instancias web. Por otra parte, pueden suponer un recurso interesante en algunos casos. Por ejemplo, para tener aplicaciones dedicadas a una única tarea de manera independiente al navegador… O casi.
Sin embargo, no hay una solución completamente satisfactoria todavía.
Las que podríamos llamar webapps nativas con soporte tanto en Firefox como en Chromium, son simples enlaces directos exceptuando alguna honrosa excepción, y para colmo ni siquiera funcionan como deberían: crean un lanzador en el panel que abre una nueva ventana del navegador, con botones y barras de herramientas incluidas, pero sin indicadores o sentido (muy cutre).
Todo comienza cuando entras por vez primera en uno de los sitios web soportados y te sale un mensaje de este tipo:
Aceptas y un nuevo icono aparece en el panel, aunque, como decimos, tiene poca utilidad. En el futuro, cuando la integración aumente, será una pasada (¿algo tipo Pokki?). Hasta entonces hay que buscar alternativas. La más completa a este respecto es Fogger, para cuya instalación hay que tirar de PPA:
sudo add-apt-repository ppa:loneowais/fogger sudo apt-get update sudo apt-get install fogger
El funcionamiento de Fogger es sencillísimo: ingresas una URL, un nombre y si quieres le cambias el icono. Cada aplicación es independiente y se ejecuta en una ventana pelada, tal y como cabe esperar.
La hándicap de Fogger, no obstante, es su estabilidad. Falla mucho. O sea, no vale la pena, teniendo disponibles a Chrome y Chromium. En efecto, los navegadores de Google ofrecen sus propias webapps a través del menú «Herramientas > Crear accesos directos a aplicaciones», y a pesar de que tampoco logran la ansiada integración con notificaciones -salvo con las extensiones del navegador-, son las que mejor se comportan a todos los niveles.
Al crear una webapp con Chrome / Chromium ésta captura el icono de la web y funciona de manera independiente en el panel de Unity. Así, la recomendación en materia de webapps está clara, al menos por ahora. Incluso si no utilizas Chrome / Chromium como navegador web principal (de hecho, casi mejor así).
Y vosotros, ¿tenéis alguna recomendación relacionada con webapps en Ubuntu? Otro día llevaremos el tema a otros escritorios, aunque la conclusión es prácticamente la misma.