Cuando un «fan de Linux» asimila Windows 10 como el último clavo en el ataúd del escritorio Linux, algo se me escapa. Porque entiendo que un Windows 10 de calidad y gratuito no va a ayudar a la expansión de GNU/Linux, pero ¿desde cuándo eso es lo único que importa?
En su artículo, Brian Fagioli culpa a la comunidad Linux por la oportunidad perdida en lo que ha sido la transición de Windows 8 y el rechazo que éste le supuso a muchos usuarios. Sin embargo, se le olvida que pasó lo mismo con Windows Vista. O sea que ya son dos las oportunidades perdidas (!).
Fagioli comenta también que la actualización a Windows 10 desde Windows 7 en adelante será gratuita el primer año… ¿y? Microsoft se adapta a los nuevos tiempos, en los que los sistemas operativos de consumo parecen relegados a monetizarse a base de servicios y contenidos; pero incluso en los viejos tiempos Windows ha sido el sistema «gratuito» por excelencia… y no hace falta añadir más, ¿verdad?
En cuanto a que incorpore mejoras varias, qué mínimo para una nueva versión. Microsoft está puliendo la experiencia de usuario en el escritorio, integrando el paradigma clásico con sus baldosines como debiera haber hecho en un principio, algo que por un lado es normal y por el otro ejemplifica que ni siquiera un gigante lo tiene fácil para innovar y que cuaje de primeras. ¿Se le pide lo mismo a las comunidades de software libre?
Las «aplicaciones universales» de Windows 10, por cierto, las tendrá Ubuntu, aunque por aquí las llamamos «convergentes» y, desafortunadamente, tardarán en llegar más de lo deseable. Los juegos… Sí, como plataforma de juegos, Windows 10 promete por su integración con Xbox y Steam, pero difícilmente se va a conformar Gabe Newell con las migajas.
Por el contrario, Valve sigue apostando por su SteamOS basado en Linux; las administraciones publicas van virando en dirección GNU/Linux y formatos abiertos; China y otras naciones van en busca de la independencia tecnológica vía Linux; Google le está metiendo caña a Chrome OS y los Chromebooks… Pequeños detalles que antes no estaban en la foto. Y lo que es más importante: la tecnología es una montaña rusa que no cesa de girar, no es sensato aventurar algo de manera definitiva.
Además, para muchos millones de usuarios GNU/Linux ya es una mejor solución que Windows, lo que significa que para muchos millones más lo podría ser también, solo que todavía no lo saben. Y no mencionamos eso tan abstracto que conocemos como software libre para que ningún tecnócrata lo confunda con un arrebato de ‘talibanux’, pero es un dato relevante más allá de la ideología.
[Imagen: Brian Gratwicke]