Tal y como confirmaron desde 2K Games, distribuidora del juego, BioShock Infinite se estrenaría para Linux a principios de 2015. Y así ha sido: ya está disponible para su compra a través de Steam. ¿Te interesa este juegazo? No tan rápido.
BioShock Infinite salió hace dos años para las principales plataformas de juego y como seguramente todos conocéis esta popular franquicia, no nos extenderemos en su descripción más allá de señalar que se trata de un título de acción en primera persona que goza de las mejores críticas. Desarrollado originalmente por Irrational Games, su paso a Linux, así como el de sus diferentes expansiones, ha corrido a cargo de Virtual Programming.
Cuál es el problema de este lanzamiento, os preguntáis. La respuesta es, si los requisitos técnicos de vuestra máquina cumplen, vuestra distribución es actual y utilizáis las últimas versiones de los controladores privativos de NVIDIA y AMD, ninguno. Según indican en GamingOnLinux, el rendimiento es muy bueno bajo ese prisma.
A saber, BioShock Infinite se basa en el motor gráfico Unreal Engine 3 y DirectX 11 y para su port se ha utilizado eON para OpenGL. Así, cuando los controladores de Intel alcancen las características de OpenGL 4.2, se supone, habrá soporte para estas GPUs.
Sin embargo, lo dicho sobre estas líneas son requerimientos obligatorios, es decir, el juego solo funcionará correctamente con las últimas versiones de los controladores privativos, Nvidia 340.65 y Catalyst / Fglrx 14.12 o superior, lo que se traduce en que aquellos usuarios de versiones LTS de Ubuntu y derivadas tendrán que actualizar sus controladores a mano, si es que quieren jugar a BioShock Infinite.