A la hora de renovar el ordenador se suelen dar dos situaciones: o bien nuestro PC «ha muerto» y urge adquirir uno nuevo cuanto antes, o se «está muriendo» y tenemos cierto margen para buscarle sustituto. La segunda situación es sin duda la deseable, porque el cambio llega un punto en el que es inevitable y con algo de tiempo se puede conseguir un mejor producto.
¿A qué viene todo esto? Al precio de los equipos Mountain, que por muy ajustado que esté, son cifras de pensárselo bien. La potencia se paga, claro, y uno no se compra un PC de gama alta todos los días. Se trata, pues, de una inversión a contemplar con detenimiento, siempre en busca de la mejor opción.
Así es como llegamos a las ocasiones de último minuto de Mountain, una sección en su web donde van colgando equipos rebajados hasta fin de existencias. Normalmente son modelos descatalogados por la inercia del sector hardware de la que hablamos hace unas fechas en otros términos, por lo que siguen siendo máquinas del mejor nivel, a un precio más interesante.
Otra de las razones para saldar un equipo o según qué modelos son promociones especiales que hace Mountain, como por ejemplo hizo con el lanzamiento de Watch Dogs, distribuyendo un modelo personalizado para la ocasión, y nunca mejor dicho.
Los descuentos siempre son bienvenidas, desde luego, y de pagar 1.000 a pagar 800 se nota. Por lo tanto, si se tiene en mente renovar el equipo y Mountain es un posible candidato, no está de más pasarse de vez en cuando por la sección de marras. Esta semana hay descuentos que van de los 90 a los 480 euros, que no está nada mal.
Sin embargo, hace bastante que Mountain ofrece best deals y no ha sido eso lo que me ha encendido la chispa para escribir este artículo. Resulta que entre las «novedades» en saldo de esta semana se encuentra el sobremesa Steel 10, un pequeñín -el hermanito pequeño del Steel X– que me encandiló nada más verlo y que desapareció del catálogo antes de poder probarlo; era el sobremesa para oficina que se iba a recomendar en un principio, pero no pudo ser. Por suerte, estaba por ahí el Quartz.
Lo que nos lleva de nuevo a la inercia del sector hardware y a cómo estoy usando un portátil -el Graphite 30– menos de un año que ya ha sido descatalogado dos veces.