Cuando se cumple un año exacto desde el lanzamiento de la última versión estable de la distribución, llega openSUSE Leap 42.1 como su reemplazo. Pero no es un reemplazo cualquiera. Con openSUSE Leap cambian muchas cosas, tantas que si los desarrolladores han acertado, podríamos estar ante lo mejor del año en lo que a GNU/Linux se refiere, con el permiso de Linux Mint.
Con openSUSE Leap 42.1 se cierra el círculo que estaba abierto y en el que openSUSE Tumbleweed ya cubre los requisitos de actualización continua. Así, faltaba una edición enfocada en la estabilidad y el soporte, y bajo tal prisma no hay nada que supere a distribuciones corporativas como la propia SUSE Linux Enterprise (SLE), en la que se basa Leap.
En resumen, estamos ante un cambio de nombre y numeración sin demasiado sentido, a la par que ante un cambio de estrategia con todo el sentido. A la sólida base de SLE se le añade software más reciente y… voilá, openSUSE Leap.
Entre las novedadesde openSUSE Leap 42.1 destaca el kernel Linux 4.1 (LTS) y el escritorio Plasma 5.4 (con KDE Applicactions 15.08) como opción predeterminada, al que acompañan para quien lo desee GNOME 3.16, Xfce 4.12, LXDE 0.99, Cinnamon 2.8, MATE 1.10 y Enlightenment 19, por lo que la oferta en este aspecto es rica, aunque la imagen DVD solo facilita la instalación de los cuatro primeros (a priori, ya que mediante YaST se puede añadir cualquier repositorio y paquete en el proceso). De igual forma cabe esperar lo último de Firefox, LibreOffice y en general las aplicaciones mas populares del escritorio Linux.
En cuanto a sistemas de archivos, openSUSE Leap sigue la senda marcada por versiones previas y apuesta por Btrfs para la raíz y XFS para la partición de datos por defecto, no obstante, la recomendación es mantener ext4 si se va a instalar en un PC.
Otro cambio importante, y este no va a gustar a todo el mundo, es que openSUSE Leap solo está disponible para arquitecturas x86-64, y solo como imagen DVD. Se acabaron los Live-CD con KDE y GNOME, al menos de manera oficial. El instalador en red, ese sí, se conserva. Aquí están las descargas (mejor por torrent, que vuela).
¿Soporte? Es otro de los puntos de interés de este lanzamiento, pues, alegraos, no recupera lo que la vieja openSUSE ofrecía, sino que lo amplía: 3 años de actualizaciones es lo que le espera a openSUSE Leap, hasta que se lance la siguiente versión mayor. Sin embargo, en estos tres años caerán actualizaciones «instalables» de Leap 42, basadas en las propias actualizaciones de SLE a razón de una al año y con un soporte menor, de 18 meses. Puede sonar a lío, pero es similar al nuevo ciclo de lanzamientos de Linux Mint, que como se sabrá se basan solo en las versiones LTS de Ubuntu; es decir, Linux Min 17 tenía más soporte que la 17.1, esta que la 17.2, etcétera. Y lo mismo pasará con openSUSE Leap 42.1, 42.2… lo que la convierte en una opción muy a destacar para ambientes en producción, sea en servidor o PC.
¿Algo más que contar? Sin duda. Pero antes hay que probarla a fondo. Mientras tanto, ya se puede disfrutar del «salto» del camaleón.