¿Cuánto tardaremos en ver en acción a Lubuntu LXQt? En el último PING incluimos una noticia importante sobre el futuro más inminente de Lubuntu, y es que «el equipo está listo para comenzar el progreso de migración hacia LXQt«. No obstante, la información era poco más que un pistoletazo de salida que no se sabe cuándo culminará en realidad. ¿Será para la próxima Ubuntu 16.10?
Lo cierto es que no ha sido un camino corto y entrar en prisas ahora no tiene sentido. La decisión de los desarrolladores de LXDE de cambiar de tecnología para su escritorio data de hace tres años: en julio de 2013 anunciaban un LXDE en Qt y apenas unas semanas más tarde, la fusión con Razor-Qt, un proyecto que siempre estuvo ahí, pero que nunca tuvo relevancia. Desde entonces han ido cayendo versiones, alguna con avances tan notables como la adopción de Qt5, hasta la última LXQt 0.10.
¿Qué ha cambiado? Es de esperar que muchas cosas. Por lo pronto, acabamos de dejar atrás una LTS, que suelen ser lanzamientos no aptos para experimentos; y si los desarrolladores están convencidos de que la migración es factible, tenemos la seguridad de que no ha sido pensat i fet. Poner a LXQt al frente de Lubuntu es un paso importante y que conferirá al escritorio ligero una visibilidad inusitada.
El primer movimiento está dado: Ubuntu 16.10 ya tiene un metapaquete (lubuntu-qt-desktop) para instalar el escritorio al completo, incluyendo aplicaciones básicas y no tan básicas. Por ejemplo, ObConf (Qt) para acceder a las preferencias de Openbox, que se mantiene como gestor de ventanas por defecto; el gestor de paquetes Muon, el reproductor multimedia SMPlayer, LibreOffice como suite ofimática… Son varias las opciones y no hay nada cerrado aún.
Pero está todo muy verde, y no lo digo yo, lo dice uno de sus desarrolladores, que poco después de saltar la noticia dejaba entrever algo del camino que queda por recorrer. El siguiente paso es crear una imagen de instalación para pruebas y los siguientes, dar cera y pulir cera hasta que brille; luego habrá que concretar las aplicaciones y herramientas instaladas por defecto y para terminar, la prueba de fuego, que es lanzarlo al público.
Será interesante ver el resultado suceda en Ubuntu 16.10 o más adelante, porque Razor-Qt no llegó a nada y LXQt puede significar la revancha en el buen sentido. La cuestión es si aguantará la comparación con su predecesor, que aparte de Enlightment es el único escritorio ligero que hay (Xfce y MATE juegan en otra liga).