Microsoft ama el Open Source, o por lo menos eso dice el gigante de Redmond desde que Satya Nadella está al frente. La conocida compañía presume de tener el mayor repositorio Git del mundo, el cual es utilizado para el código fuente de Windows y no está disponible para el público (no hay que confundir Git con GitHub).
Git no servía a Microsoft tal y como estaba concebido, por lo que la compañía decidió contribuir a su desarrollo para adaptarlo al desarrollo de Windows. Aquellos esfuerzos desembocaron en la creación de GVFS, una tecnología de réplica virtualizada de un repositorio Git con metadatos y los ficheros que han sido recuperados explícitamente, eliminando así la necesidad de tener que replicar todos los ficheros en cada modificación. Es obvio que tener que refrescar todo lo que contiene un proyecto tan grande como Windows es ya de por sí una tarea costosa en tiempo y recursos.
Pero no solo a Microsoft le sirven las mejoras que ha incluido en Git, ya que además ha respetado la naturaleza Open Source del proyecto y las has puesto a disposición de todos los usuarios del gestor de versiones, esperando a cambio que las contribuciones de otros también les sirvan a ellos.
Derrick Stolee, ingeniero de software senior en Microsoft, ha publicado una entrada en el blog de DevOps de Microsoft en la que detalla las mayores aportaciones de la compañía a Git durante 2017, destacando un aumento significativo en la velocidad de carga del índice y otras pequeñas optimizaciones para la mencionada característica, el añadido de flags al comando status y se ha mejorado el rendimeinto de git status –ignored un 50%. Además, ha contribuido a la abreviación de los objetos de hashes presentados por muchos comandos de Git.
Desde Microsoft hacen hincapié en que Git se ha convertido en el gestor de control de versiones de los proyectos de la compañía, siendo almacenado en Visual Studio Team Services. Por otro lado, ha anunciado que ha incrementado su inversión para mejorar aún más este software.