Tras confirmarse la adquisición de GitHub por parte de Microsoft, son muchos los que se han planteado la utilización de una alternativa por el temor a las posibles políticas que podría aplicar el gigante de Redmond (sobre todo a las llamadas Tres E).
Con la polémica en plena ebullición, parece que de momento no habrá muchos proyectos que cambien de servicio. Aun así, aprovechamos la ocasión para recordar a seis de las alternativas más conocidas, con propuestas tanto privativas como abiertas. En MuyLinux no vamos a decir cuál es mejor, sino que dejaremos esa decisión en manos de los usuarios.
GitLab
Mucho ha sonado GitLab últimamente, y es que posiblemente sea el competidor más fuerte que tiene GitHub desde hace tiempo.
La principal ventaja que tiene GitLab es el hecho de ser software libre, estando su código publicado bajo MIT. Esto permite que pueda ser bifurcado y reimplementado en un servidor propio. Por otro lado, su interfaz y forma de funcionar son similares a los de GitHub, aunque con el añadido de que permite crear repositorios privados de forma gratuita, algo que puede venir muy bien a esos desarrolladores que no estén interesados en exponer su código y no quieran pagar por ello.
Otras características son la posibilidad de migrar fácilmente desde GitHub (algo que muy posiblemente sea potenciado a partir de ahora) y los planes de pago para aquellos que no quieran invertir en un servidor propio.
No podemos olvidar que recientemente GNOME ha completado su migración a GitLab, llevándose consigo a GIMP, lo que podría ayudar este servicio a ganar adeptos entre el público linuxero.
Bitbucket
Bitbucket es otra alternativa bastante interesante para alojar código. Perteneciente a la empresa Atlassian, es privativo, aunque permite crear repositorios privados de forma gratuita, además de soportar la importación desde GitHub.
Al pertenecer a Atlassian, está fuertemente integrado con otros gestores de proyectos pertenecientes a la misma compañía, como Jira, HipChat y Confluence, lo que le da bastante atractivo para las empresas desarrolladoras de software. Según sus planes, es gratuito para equipos de hasta cinco miembros, por lo que puede venir bien como punto de partida y luego pasar a los planes de pago una vez que el proyecto o la empresa hayan aumentado de tamaño.
GNU Savannah
No podíamos dejar en la cuneta a GNU Savannah, la solución de gestión de proyectos de la Free Software Foundation.
Como no podía ser de otra forma, GNU Savannah es totalmente software libre y según Wikipedia ofrece soporte para CVS, GNU arch, Subversion, Git, Mercurial, Bazaar, listas de correo, hospedaje web, hospedaje de archivos y seguimiento de bugs. Actualmente está dividido en dos dominios: savannah.gnu.org para software oficial del proyecto GNU y savannah.nongnu.org para todo software libre no perteneciente a GNU.
Su propósito es servir de soporte solo para proyectos software libre, no permitiendo en sus políticas de alojamiento tecnologías privativas como Flash.
SourceForge
SourceForge es uno de los mayores casos de “ave fénix” que se hayan visto en la historia del software. Hace tres años nos hacíamos eco de cómo el servicio agonizaba por culpa del exceso de avaricia de sus dueños, que terminaron por convertirlo en todo un desafío para la integridad de sus propios usuarios, sobre todo los de Windows.
Afortunadamente, una nueva dirección ha devuelto este servicio a su lugar para que vuelva a ser lo que era. Obviamente, la publicidad no ha desaparecido totalmente, porque de algo tiene que vivir la empresa que está detrás, pero al menos su política ya no es agresiva con los usuarios y eso es algo de agradecer. En la actualidad muchos proyectos Open Source relevantes se apoyan en SourceForce.
Cabe destacar el reciente rediseño del sitio web, que le ha otorgado un aspecto atractivo y moderno.
Gitea
Cerramos la lista de alternativas con Gitea. Según su propia documentación, es un servicio de Git autoalmacenado que intenta ser fácil de manejar y de características similares a GitHub, Bitbucket y GiLab, siendo resultado de la bifurcación de Gogs.
Es Open Source (publicado bajo MIT) y está escrito con Go de Google, lo que le permite ser independiente tanto del sistema como de la arquitectura, pudiendo soportar GNU/Linux, Mac y Windows sobre arquitecturas como amd64, i386, ARM, PowerPC y otras.
Phabricator
Phacility Inc. es la desarrolladora de Phabricator, según Wikipedia, una suite de herramientas de aplicaciones web para colaboración de desarrollo de software, incluida la herramienta de revisión de código Differential, el repositorio de código Diffusion, la herramienta de monitoreo de cambios Herald,4 el gestor de errores, Maniphest y la wiki Phriction.5 Phabricator integra Git, Subversion y Mercurial. Es software libre al estar su código publicado bajo Apache License 2.0.
Phabricator fue originalmente una herramienta interna de Facebook, pero ahora es un desarrollo independiente y cuenta entre sus usuarios a Blender, Cisco Systems, Dropbox, FreeBSD, GnuPG, Facebook, Nokia, KDE y Wikimedia. Además del servicio gratuito, Phacility cuenta con planes y soporte de pago.
Conclusión
A pesar de que el volumen tanto de proyectos como de desarrolladores activos en GitHub es muy superior, está visto y comprobado que existen alternativas sólidas a este servicio que pueden cubrir las necesidades desde distintas perspectivas.
Como ya dijimos al principio, no vamos a decir cuál es mejor, y obviamente, aquí solo hemos puesto seis ejemplos, existiendo otras muchas alternativas como Gogs.