Con el lanzamiento de Ubuntu 20.04 LTS el próximo abril, llegará también un cambio que ya nadie esperaba, porque ya nadie se fijaba en ello: el adiós del acceso directo de Amazon en Ubuntu, ese que casi cualquier usuario de Ubuntu se quita de la vista conforme instalar el sistema, antes incluso de cambiar el wallpaper.
Lo cuentan en OMG! Ubuntu! y es un hecho significativo, porque ese acceso directo de Amazon en Ubuntu era ya parte de la imagen por defecto de la distribución, tras más de ocho años sin moverse del sitio. Aunque como seguramente recordéis muchos, no se introdujo exento de escándalo. Más bien todo lo contrario.
El último capítulo lo vivimos a principios de 2016, y es que a partir del lanzamiento de Ubuntu 16.04 LTS, la distro dejaba de ser considerada como spyware por algunos. En esencia, lo que sucedió con esa versión es que las búsquedas en línea en el Dash y las Lenses de Unity estaban desactivadas de manera predeterminada. Tres años antes, esta característica le valió a Ubuntu el injusto premio de Big Brother 2013.
Y todo comenzó con ese acceso directo de Amazon en Ubuntu, sí. Con la llegada de Unity, llegó también el intento de Canonical por sacarle partido a las aplicaciones web, de las cuales la de Amazon era una de las más destacadas. La pretensión de la compañía es que los usuarios de Ubuntu la utilizasen para realizar sus compras y así llevarse un porcentaje mínimo como referido.
Pero la implementación no fue la idónea en sus primeros compases, y no fue hasta unas versiones más tarde que cifraron el tráfico para hacerlo opaco de cara a Amazon. Entonces lo denominamos con un batacazo en materia de privacidad, y lo que pasó con los premios Big Brother lo confirmó, por más injusto que fuese darle tal galardón a Ubuntu, cabe repetir, tal y como estaban las cosas (en 2013 fue cuando saltó el escándalo de Edward Snowden).
Lo cierto, no obstante, es que ni las aplicaciones web funcionaron en Ubuntu -la implementación fue pésima: eran accesos directos que abrían una pestaña en Firefox- ni la de Amazon en particular ayudaba a ello. Al fin y al cabo, ¿quién necesita un acceso omnipresente a una tienda? La mayoría de la gente lo eliminaba y utilizaba el navegador, como es obvio.
Con esas, los desarrolladores de la distribución han tenido a bien quitar de en medio lo que llevaba mucho tiempo siendo un estorbo y dos clics que nos ahorran a los usuarios. Más vale tarde que nunca.