Los encargados de Kali Linux, la derivada de Debian centrada en la realización de tareas de hacking ético y pruebas de penetración, han anunciado el lanzamiento de la versión 2020.2 de la distribución.
Lo primero que destaca de Kali Linux 2020.2 son las modificaciones introducidas en KDE Plasma con el fin de mejorar la experiencia visual del entorno, o sea, lo que los anglosajones llaman “look and feel”. Los encargados de la distribución se han molestado en introducir su propio tema con variantes oscuro y claro, y por lo que se puede ver en las imágenes, luce bastante bien.
Los temas estéticos también llegan al gestor gráfico de sesiones de la distribución, LightDM, otorgándole en esta ocasión un aspecto diferente, más moderno y con los campos del inicio de sesión alineados. Quizá el hecho de haber iniciado este año un acercamiento al usuario de escritorio estándar haya influido en estos cambios.
PowerShell, la shell de última generación Open Source de Microsoft, gana terreno en Kali Linux 2020.2 tras ser introducido en el metapaquete “kali-linux-large”, uno de los más importantes de la distribución. Los encargados del sistema avisan que por ahora PowerShell no ha sido incluido en el metapaquete “kali-linux-default”.
Aunque x86_64 sigue siendo la arquitectura reina cuando se trata de producción, sobre todo con las tareas pesadas, ARM está ganando terreno poco a poco, hasta el extremo que Canonical, Red Hat y SUSE han tenido que adaptar sus productos y ofrecer soporte. Kali Linux 2020.2 para ARM destaca por no usar más “root/toor” como credenciales por defecto para iniciar, habiendo sido esto sustituido por “kali/kali”, por lo que ya no se inicia sesión como root por defecto. Otros aspectos a tener en cuenta son la necesidad de tener una tarjeta SD de 16GB como mínimo para la imagen del sistema y la necesidad de ejecutar el comando “sudo dpkg-reconfigure locales” para las configuraciones regionales.
Debido a algunos problemas hallados en el instalador, este ha recibido algunos cambios. Por ejemplo, la opción de instalación “kali-linux-everything” ha sido eliminada de la imagen instalación y se ha cacheado el paquete “kali-linux-large” en cada unos de los entornos de escritorio para permitir una instalación completa desde offline. Por otro lado, se ha eliminado la personalización del instalador live, el cual también permite una instalación completa desde offline, pero forzando el uso del escritorio Xfce.
Otras novedades de Kali Linux 2020.2 son la puesta a disposición del sorprendente GNOME 3.36 y las últimas versiones de Joplin, Nextnet, NetHunter y SpiderFoot junto a Python 3.8. Los encargados del sistema recomiendan migrar el código de Python 2 a la tercera versión debido a que la más veterana no cuenta con soporte desde el inicio de este año 2020.
Kali Linux 2020.2 puede ser descargado desde la correspondiente sección en el sitio web oficial de la distribución u obtenido mediante actualización siguiendo las instrucciones publicadas en las notas de lanzamiento.
