Los ciclos del software terminan, pero son interminables. ¿Contradictorio? Nada más lejos de la realidad. Es lo que es, que dicho en castellano no suena tan bien como en inglés, pero se entiende igual. En resumen, toca ir despidiéndose de Debian 8, pero también de Debian 9. Más o menos.
Debian 8 con nombre en clave ‘Jessie’ se lanzó en abril de 2015 y, por lo tanto, ha cumplido su ciclo vital regular, incluyendo los tres años de soporte corrientes y los dos adicionales al cargo del equipo de mantenimiento LTS. La fecha de ‘defunción’ exacta de esta versión fue el 30 de junio pasado, a partir de la cual Debian ya no proporcionará más actualizaciones de seguridad o de cualquier otro tipo.
No obstante, y a pesar de que el soporte LTS ‘oficial’ de Debian 8 ha terminado, la versión seguirá más tiempo en mantenimiento si cable gracias al soporte LTS extendido se prevé que llegue a 2022, aun cuando se trata de un soporte mucho más limitado en cuanto a arquitecturas y paquetes.
Por su parte, Debian 9 con nombre en clave ‘Stretch’ se lanzó en junio de 2017, por lo que ya ha completado su periodo de soporte corriente y entra en fase LTS, cuyo soporte LTS se alargará hasta cumplir los cinco años de rigor en junio de 2022. El próximo 18 de julio se publicará la última imagen de instalación de esta versión del sistema.
Debian 9, además, será la primera versión de la distribución que ofrecerá soporte extendido para arm64, que se suma al resto de arquitecturas con soporte LTS, incluyendo amd64, i386, armel y armhf.
Con todo, eso no son noticias que deberían preocupar a los usuarios de Debian en PC, pues lo recomendable a estas alturas es tener instalada Debian 10, la última versión estable del sistema en curso que el pasado mayo lanzó su cuarta actualización de mantenimiento.