Tras la debacle acusada por Mozilla en 2020 y los desarrollos internos que se dejó por el camino la compañía, incluyendo una multitud de despidos nunca vista, el único proyecto cuya continuidad no generó ninguna duda es el del lenguaje de programación Rust, un aporte realmente innovador que ha gustado mucho dentro y fuera de la propia Mozilla.
Así, una vez desligado el porvenir de Rust de las peregrinas decisiones de la multinacional, la creación de una Rust Foundation que velase por el mantenimiento y avance del lenguaje de programación era solo cuestión de tiempo, como así ha sido: este febrero de 2021 nació la Rust Foundation, una entidad sin ánimo de lucro cuyo lema, no obstante, es clarificador: «el buen software lo crean personas felices y bien sustentadas«.
«La Rust Foundation es una organización independiente sin ánimo de lucro que administra el lenguaje de programación y el ecosistema Rust, con un enfoque único en apoyar al conjunto de mantenedores que gobiernan y desarrollan el proyecto«, tal es la descripción que hace la Rust Foundation de sí misma. Una descripción muy significativa, dicho sea de paso, no solo en relación al proyecto que nos ocupa, sino al ecosistema del software de código abierto en general.
En otras palabras, lo que Mozilla creó y ayudó a hacer crecer, transformado ahora en una Rust Foundation ‘independiente’, será mantenido económicamente por un grupo de miembros entre los que se cuenta la propia Mozilla, pero también Amazon Web Services, Google. Huawei y la última gran compañía en unirse al elenco inicial, Microsoft. Porque he aquí lo importante: cuando hablamos de elenco inicial, lo hacemos de los miembros fundadores de la organización.
En definitiva, Rust tiene asegurado su futuro con la Rust Foundation y con el dinero que aportarán sus miembros fundadores y aquellos que les sigan, que sin duda serán más. Muchos de los que, de una manera u otra, se benefician de este lenguaje de programación. Y es que de todas las cosas que ha hecho mal Mozilla en los últimos años, Rust no es, desde luego, una de ellas.
De hecho, a Mozilla también le conviene que la tecnología continúe, ya que su uso en Firefox es cada vez mayor. Podemos decir, pues, que esta jugada ha sido inteligente y les ha salido bien. Visto lo visto, lo siguiente podría ser una Mozilla Foundation sin ánimo de lucro que garantizase el porvenir de Firefox y…¡ups!