Los Chomebook llevan años posicionados como la alternativa Linux más sólida frente a Windows y macOS, y así lo están avalando los números de ventas que se han ido conociendo a lo largo de los años. Los portátiles que tienen a Chrome OS como sistema preinstalado están cada vez más consolidados, hasta el extremo de empezar a superar de manera consistente las ventas de Mac a nivel mundial.
Chrome OS el sistema operativo para ordenadores de escritorio que Google anunció hace una década y el que se encarga de hacer funcionar los conocidos portátiles Chromebook. La intención del gigante de las búsquedas era más o menos replicar el modelo que ya se impulsó a través de Android, utilizando Chromium OS como base, Linux como kernel y apoyándose fuertemente en los servicios en la nube. Si bien al principio los Chomebooks suscitaron ciertas susceptibilidades entre los usuarios de GNU/Linux, el hecho de que derive que Gentoo y ciertos movimientos de Google podrían terminar convirtiéndolo en un buen aliado para las distribuciones derivadas de las herramientas del proyecto GNU.
Chrome OS ha tenido una proyección muy interesante a lo largo de su trayectoria, mejorando a nivel de funcionamiento, aplicaciones, facilidad de uso, seguridad y soporte. Los ordenadores que lo preinstalan, los Chromebook, han ido ganando adeptos de manera sigilosa, sobre todo porque su crecimiento se ha concentrado durante muchos años en un sector que no suele acaparar grandes titulares en los medios dedicados a la tecnología: el educativo. A lo mencionado hasta aquí se suma el hecho de que dichos equipos han conseguido el respaldo de grandes fabricantes como Acer, Samsung, Dell, HP y Lenovo.
Pero que los Chromebook superen en ventas a los reputados Mac de Apple no es algo nuevo de por sí, ya que en 2016 informamos de esta misma tendencia, aunque reducida a Estados Unidos. Ahora IDC pone de manifiesto que la tendencia se está replicando a nivel mundial, sobre todo a partir del primer trimestre de 2020. Tomando los datos de todo el año anterior, Chrome OS acaparó el 10,8% de cuota, mientras que macOS se hizo con el 7,5%. Esta situación ha dejado a Windows con el 80,5% de cuota, lo cual sigue siendo muchísimo, pero menos de lo que nos tenía acostumbrados el sistema de Microsoft.
La cercanía o lejanía de Chrome OS del espectro GNU/Linux puede depender de algunos factores que todavía siguen en el aire. La intención de Google es que Stadia se convirtiese en la plataforma de juegos para los usuarios de Chromebook, pero viendo que el servicio parece estar languideciendo (aunque no tirará fácilmente la toalla), eso podría acelerar la llegada del cliente de Steam basándose en el disponible para GNU/Linux. A fin de cuentas, a Google no le interesaría repetir el fallo de tener que empezar un catálogo desde cero.
Si bien comprar un Chromebook es la vía más fácil para hacer uso de Chrome OS, los usuarios pueden obtener algo similar recurriendo a bifurcaciones de Chromium OS como la popular CloudReady, que a finales del año pasado acabó adquirida por Google en un movimiento que ha despertado ciertas susceptibilidades.