Canonical ha anunciado la ampliación del soporte de las versiones 14.04 LTS y 16.04 LTS de Ubuntu hasta los 10 años. Esto quiere decir que los usuarios de pago se beneficiarán de algo que ya fue implementado en los posteriores lanzamientos LTS del sistema: 18.04 y 20.04.
Las versiones LTS de Ubuntu puestas a disposición de forma gratuita ofrecen un máximo de cinco años de soporte. Esos cinco años hacen referencia sobre todo a servidores, mientras que en escritorio el soporte regular se sirve durante tres años y en los dos restantes se centran en las actualizaciones de seguridad. Sin embargo, a cambio de pagar a Canonical se puede extender la vida útil de una instalación de una versión LTS después de cumplir el tiempo de soporte gratuito.
Ubuntu 14.04 LTS y 16.04 LTS han estado mantenidas durante cinco años adicionales a través del servicio de pago Extended Security Maintenance (ESM) o mantenimiento de seguridad extendido. Lo que ha hecho Canonical ha sido extender de manera retroactiva lo que ha implementado para las versiones 18.04 LTS y 20.04 LTS. Dicho con otras palabras, Canonical ha añadido a 14.04 LTS y a 16.04 LTS a los ciclos de lanzamiento con 10 años al ampliar el soporte de ESM.
Recordamos que este cambio retroactivo no afecta a los que utilizan Ubuntu de forma gratuita al ser una medida dirigida a empresas, que por lo general no suelen o no pueden realizar tantos cambios en su entorno como los usuarios domésticos. Con esto, Canonical brinda una oportunidad a aquellas empresas que se han anclado a Ubuntu 14.04 LTS o 16.04 LTS para que puedan seguir recibiendo actualizaciones de seguridad y corrección de bugs.
En resumidas cuentas, y a cambio de pasar por su caja, Canonical ha ampliado oficialmente el soporte de Ubuntu 14.04 LTS hasta el año 2024 y el de Ubuntu 16.04 LTS hasta 2026. Posiblemente el caso de Ubuntu 14.04 sea especial al ser la última LTS en usar Upstart como init en lugar de systemd.
Desde que puso fin a su estrategia en torno a la convergencia y el mercado doméstico, Canonical se ha centrado en los servidores y el mercado corporativo, donde compite con SUSE y Red Hat. Con las empresas convertidas en sus únicos clientes, porque es obvio que un usuario doméstico no va a pagar por Ubuntu, la compañía de Mark Shuttleworth tiene que moverse para posicionarse frente a sus rivales, y ampliar el soporte de viejas versiones es una buena medida en un sector que tiende a ser muy reacio a los cambios.
Para terminar, Canonical ha lanzado por sorpresa Ubuntu 18.04.6, la última versión de mantenimiento de la penúltima LTS con los últimos parches de seguridad. Aquí destaca la inclusión del parche para corregir BootHole, una vulnerabilidad crítica que afectó a GRUB.