… más del 50 por ciento de sus afiliados a las actualizaciones por correo electrónico son usuarios del servicio de Google, y algo hay que hacer.
Si no puedes con tu enemigo, únete a él, reza el dicho, pero en la Free Software Foundation no están muy por la labor. Prefieren buscar los puntos flaco de su adversario y explotarlos, si puede ser con ayuda de sus usuarios. Y que nadie entienda mal ésto, porque en parte estoy de acuerdo con las razones que se esgrimen en la Campaña (anti)Gmail que la fundación encabezada por Richard M. Stallman está llevando a cabo.
De hecho, a la FSF no le gusta en general ningún servicio que haga uso de software privativo y más que atacar, lo que se pretende es prevenir e instruir en algunas conductas que serían -o son- aceptables para algunas personas, no todas, intentando minimizar en lo posible el supuesto daño que se podría padecer.
En cuanto a Gmail, la razón de esta campaña es la de siempre: no se sabe qué hay detrás de ese software cerrado en forma de JavaScript que Google usa a diestro y siniestro en su correo electrónico, ni cuáles son sus consecuencias para el usuario. Es por ello que se proponen tres pasos a todos aquellos que no quieran prescindir de ese servicio, pero si ponerle algo de cota:
- Contacta con cualquier conocido que use Gmail (y ponle al tanto de la situación)
- Actualiza tu firma en Gmail (y advierte de la situación)
- Lee la guía de cómo usar Gmail sin JavaScript (y ponla en práctica)
Creo que no hace falta hacer ninguna encuesta para determinar que una amplia mayoría de quienes leéis MuyLinux sois usuarios de Gmail, así como seguidores de la filosofía del software libre. La cuestión es, ¿qué pesa más?