La última encuesta que hicimos en estas páginas dejó un par de cosas muy claras: GNU/Linux es un sistema que cubre bien las necesidades de muchos usuarios. Al mismo tiempo, hay factores importantes que precisan mejorar para que sus bondades se extiendan al gran público, siendo los juegos, aplicaciones propietarias clave y soporte de hardware y periféricos los más cruciales.
¿A qué viene remover otra vez el tema? A que he leído hoy un par de artículos que se complementan entre sí y que me gustaría comentar aquí. En el primero su autor se pregunta si la usabilidad ha supuesto un handicap para la adopción de Linux en el escritorio. Puede tener algo de razón de fondo, pero lo enfoca mal, muy mal.
El problema con la exposición que hace, basada en sus experiencias personales, es precisamente que está demasiado concentrada en sus propias vivencias. Por ejemplo, dice que es usuario de Linux desde que tuvo su primer PC, hace unos cuatro años, y desde entonces solo ha usado Fedora.
Así, lanza afirmaciones como que «los usuarios de Linux tienen que aprender a utilizar editores de texto y a editar los archivos de configuración del sistema«. También cita otros impedimentos, como la no disponiblidad de «extras» propietarios (controladores, códecs, etc), que el usuario tiene que buscarse la vida para instalar. Además, hace hincapié en la lata que supone actualizar el sistema cada seis meses para encontrarse con nuevos errores, entre otras cuestiones.
La verdad es que podría haber sido un artículo aceptable si lo hubiese publicado como una opinión personal sobre su experiencia con Fedora, en lugar de intentar abrir un debate sobre GNU/Linux en general, soltando afirmaciones rotundas que solo consiguen dejar en entredicho su conocimiento sobre la materia.
Y aquí surge el segundo artículo, que encontraréis en Xenode Systems, donde su autor explica para qué vale Fedora y para qué no. Porque muchas veces la gente se confunde, y como Fedora es «de las grandes», pues servirá igual que Ubuntu, Mandriva o OpenSUSE, ¿no? Pues no. O no para todo el mundo.