La comunidad de Fedora se ha planteado rediseñar y modernizar la interfaz gráfica de usuario de Anaconda, el instalador empleado principalmente por el espectro Red Hat y los clones de RHEL.
Según se puede leer en una entrada publicada en el blog de la comunidad de Fedora, la intención es reescribir la interfaz gráfica de Anaconda con tecnologías web y empleando Cockpit. Hasta ahora (y seguro que seguirá siendo así en las próximas versiones de Fedora) la interfaz gráfica del instalador ha sido construida con GTK, pero algunos miembros de la comunidad han empezado a ver que es hora de modernizarlo y mejorarlo.
Desde Fedora creen que Cockpit es una solución madura con un gran soporte para el backend del instalador: Anaconda DBus. Además, parece que hay entendimiento con los responsables de Cockpit, ya que estos han brindado su apoyo y tienen conocimientos de lo que podrían necesitar los encargados de Anaconda, algo a lo que se suma el cada vez mayor apoyo que tiene Cockpit según palabras publicadas en la entrada del blog.
El apostar por tecnologías web debería de ofrecer una experiencia con el sistema más consistente a través de las aplicaciones, abriendo la puerta, por ejemplo, a una mejor experiencia de usuario con las instalaciones remotas en comparación con la actual solución basada en VNC. No se descarta la introducción de más mejoras o nuevos enfoques en torno a la experiencia de usuario.
De cara a los usuarios de Fedora, la experiencia con Anaconda no debería de verse radicalmente afectada debido a que una gran parte del instalador está ahora compuesta por módulos construidos con la API de DBus, la cual seguirá siendo utilizada. Dicho con otras palabras, en Fedora (y por ende Red Hat) no van a deshacerse de Anaconda, sino que simplemente se han planteado reconstruir la interfaz gráfica de usuario empleando tecnologías web.
El rediseño de la interfaz gráfica de Anaconda está en estos momentos en una fase muy temprana de su desarrollo, así que habrá que esperar un tiempo para verlo incluido al menos como una vía opcional en algunas de las ediciones de Fedora. Viendo el alma vanguardista y hasta experimental de la distribución comunitaria patrocinada por Red Hat, a buen seguro que será incorporado a la mínima que sea usable.
Anaconda es un componente que recibe muchas críticas por parte aquellos que no comulgan con el espectro de Red Hat y que por lo tanto genera mucho debate. Si bien en las ediciones Workstation y Silverblue de Fedora es bastante disfrutable, cuando llegamos a la edición Server o a CentOS/RHEL puede llegar a ser un tanto confuso. Veremos si la comunidad de Fedora aprovecha la ocasión para poner orden donde aparentemente no lo hay en estos momentos.